Hubo unas época en la que el friki existía. No se utilizaba ese concepto, pero yo era un de ellos, de los más grandes. En mi cabeza no había el más mínimo espacio para las mujeres más guapas del mundo. De hecho, no entendía poque ellas se empeñaban en salir con nosotros, cuando no les interesaba jugar al fútbol lo más mínimo. Yo solo necesitaba de dos cosas, mi pelota y el periódico deportivo de turno. Si podía ser el Marca y el AS mucho mejor, para poder contrastar y considerarme así una persona objetiva, que habla con conocimiento de causa.
Esta situación llegó a ser bastante preocupante. Vivía noticias como si fueran algo grande. Un fichaje del Poli Ejido podía llegar a ser algo importante en mi vida. Cualquier alineación de primera, de segunda, el puesto en el Tour de Prudencio Indurain... lo sabía todo. Los domingos, después de jugar con mis amigos el partido del barrio, me ponía la radio y me escuchaba el Carrusel de los equipos madrileños. Esos "partidazos" del Santa Ana, el Aviación... Incluso seguía a Maxi, el máximo goleador de la preferente madrileña. El tema ahora lo veo preocupante, entonces me hacía feliz.
No solo el fútbol y el ciclismo centraban mi atención. Las olimpiadas era como un sueño hecho realidad. El problema era cuándo dormir. La afición se extendía compulsivamente hacia todos los deportes. La llegada de Eurosport o Teledeporte abrió nuevas fronteras. Me podía enganchar a partidos de Curling, dardos, billar...
Un día, ya en tiempos de Gol TV, me sorprendí debatiendo sobre mi interés o no en un partidazo. Iba a dejar de ver el Ajax de Amsterdam - AZ Alkmar por estar haciendo... nada. Para aquellos entonces, ya me había dado cuenta de lo que hay más haya de la caja tonta y otros medios de difusión del deporte... Gracias a Dios.
Esto que os cuento me hace tener un criterio de selección bastante amplio a cerca de los grandes deportistas. Después de haber vibrado con Paulo Roberto, Futre, Indurain, Steffi Graf, Albel Antón, Gasol, Senna... hay uno por encima de todos que guardo en el recuerdo. Bajo el patrocinio de Nike y corriendo para el Club de Santa Mónica o el equipo americano de atletismo, los mejores momentos vienen de la mano de Carl Lewis. Sus méritos no tienen frontera. Un ejemplo deportivo, más allá de muchos otros como Maradona. Dentro de su carrera deportiva, un momento guardo en el recuerdo más que cualquier otro...
http://www.youtube.com/watch?v=ybEs3j_MmrA
Perdió...pero fue brutal. Lo veo y se me pone la carne de gallina.
http://www.youtube.com/watch?v=Y7GE06jRCMc
No hay comentarios:
Publicar un comentario